noviembre 07, 2007

LOS DERECHOS DE AUTOR (TRES)


Una síntesis editorial sobre el tema en cuestión

Con el título que figura más abajo, la profesora Stella Maris Fernández, publicó en el número 79 de los folletos desplegables de la Peña del Libro "Trenti Rocamora" que dirige Luis Lacueva, este intersante artículo sobre el tema que nos viene ocupando (Derechos de autor, uno y dos, en este mismo blog), acercandonos además su personal punto de vista sobre este controvertido tema.

UN CASO INTERESANTE SOBRE DERECHO DE AUTOR

Por Stella Maris Fernández

Con el título de Una revolución en los derechos de autor, página 12 del 13 de agosto de 2006 plantea hasta qué punto pueden los herederos utilizar su poder para obstaculizar una investigación académica, tema sumamente controvertido y cuya resolución será de interés.
El planteo se originó en la presentación efectuada ante un tribunal californiano por una profesora de literatura de la universisdad de Stanford (ver en este mismo blog los textos citados como uno y dos) por considerar obstaculizada su investigación sobre el escritor irlandés, Jamés Joyce, fallecido en Zurich en 1941, por el nieto de este, Stephen; heredero de sus derechos hasta 2012 cuando hayan transcurrido los 70 años de la muerte de su abuelo, quién las ultimas dos décadas negó sitemáticamente accder a los documentos que tiene a su resguardo y con mucha frecuencia hasta la posiblidad de citar la obra de su abuelo.
La profesora, Loeb Schoss, que originó este planteo, investiga la influencia que la hija de Joyce, Lucía, pese a su larga internaci´n psiquiátrica, pero de gran talento, había ejercido sobre las obras de su padre, especialmente sobre una de ellas.
Stephen Joyce de 74 años, en 1986 había anunciado publicamente la destrucción de las cartas que Lucía le había enviado a él y a su esposa, si bien afrimó que ningún papel o carta en manos de su abuelo, no los había destruido aún y en carta al The Nueva York Times, al año siguiente había expresado: "Yo creo firmemente que hay una parte de la vida de cada ser humano que independientemente de lo famosos que sea, debería permanecer privada" y Además creo que la privacidad de la familia Joyce ha sido invadida más que las de cualquier otro autor en este siglo. Si mi mujer y yo nos encontraramos cartas así de íntimas (como las 1909, escritas por James Joyce a su mujer Nora con un alto contenido erótico, y publicadas después de la muerte del autor), las destruiríamos enseguida", advertía, preguntándose "¿cómo se sentirían James y Nora ante esa escandalosa intrusión en la parte más íntima de sus vidas?".
Contra esas afirmaciones fueron numerosas las reacciones de los investigadores joyceanos quienes subrayaron que "debido al fuerte componente autobiográfico de la obra del autor, es de suma importancia la investigación sobre su vida y las personas que lo rodearon".
Las afirmaciones de Stephen de 1998 y 1999 provocaron una tempestosa relación entre el nieto de Joyce y el mundo académico. A estas reacciones se sumo también la fundación James Joyce de Zurich que calificó de ditactorial esa actitud.
El equipo de abogados de Stanford que representa a la profesora argumenta: "El derecho de autor fue usado para proteger a los creadores, no para dar a los herederos el poder de bloquear a los acdémicos. Con el tiempo, sin embargo, se ha ido imponiendo con éxito prácticas intimidatorias por parte de los herederos".

La causa es una cuestión de principios. "No se puede trabajar bajo constantes amenazas" expresa la profesora cuyo libro sobre Lucía Joyce, publicado en 2003, apareció con duros recortes, pues Stephen negó el permiso para publicar numerosos extractos recolectados durante 15 años de trabajo, y la editorial para evitar riesgos de demanda aceptó cortarlos, si bien estas citas eran de público acceso. También la luvha de Stephen es de principios pues al restringir la utilización del material renunció a los ingresos correspondientes".

(Publicado con la autorización personal de la profesora Stella Maris Fernández).

EL TEXTO EN CUESTION:

En Lucia Joyce: To Dance in the Wake, Loeb Shloss, especialista joyceana y profesora en la Stanford University Carol, vuelve a examinar la vida de la hija del más grande escritor irlandés de todos los tiempos y, de paso, acusa a biógrafos previos de haber contribuido a crear una imagen desequilibrada de la joven.

***

LA PROXIMA SEMANA PUBLICAREMOS EL ENSAYO:
"LA LOCURA DE JOYCE" POR SÉRGIO LAIA

"La locura de Joyce" como cifra del texto joyceano propone un enigma. Esta tesis avanza su elucidación investigando los "probables rastros" que quizás orientaron a Lacan hacia tal formulación. S. Laia propone a la obra de James Joyce como un suplemento, porque ella es tejida como un sintóma que permite a su autor "...imponer al mundo su nombre y así forjar su propia versión de lo que puede hacer las veces de paternidad..."

No hay comentarios.: